Resultó muy interesante dentro del estudio de esta unidad, que como licenciado en Educación, mención filosofía, me ha tocado estudiar en varias ocasiones el nacimiento de los paradigmas y lo importante que resultan ser para mover “in crescendo” al mundo entero, porque ellos son los que limitan o liberan al hombre de si mismo y de los demás.
Es por ellos que como educador y como persona, siempre busco estar abierto al cambio, es decir abierto a los cambios paradigmáticos, buscando crecer, buscando el logro de mis metas personales y sobretodo profesionales, donde mi interés no soy yo mismo sino la formación en valores de todos mis alumnos y alumnas, que sean capaces de enfrentar el mundo en el que se desenvuelven y más aún, que sean capaces de transformarlo hacia el bien, el bien de todos.
Y me di cuenta a través de las lecturas, que la intención de un gerente o un líder, un educador en este caso, no es estar atento a cambiar, por salir de paradigmas que puedan “frenar” por así decirlo el crecimiento del grupo, sino que ciertamente aún cuando busque y busque cambiar, en realidad siempre se está inmerso en un paradigma. Pero eso no es negativo: he allí mi nuevo descubrimiento a nivel personal en este momento.
No debe preocuparme el darme cuenta que me encuentro inmerso en un paradigma, que indudablemente está marcando mi forma de educar, mi forma de ejercer un liderazgo, mi forma de ejercer mi autoridad y poder en todos los ámbitos en los que me desenvuelvo, sino que lo más importante, y lo que me hace ser un buen líder, es la capacidad que pueda tener de innovar, de cambiar, de saltar de un paradigma al otro, de ser flexible, logrando que todos los que estén por debajo y por encima de mi, puedan alcanzar también el éxito. Y digo por encima y por debajo, aún sabiendo que mi paradigma gerencial es de la horizontalidad, donde todos somos iguales, y donde todos somos capaces de aportar algo nuevo para mejorar.
Es por ello que me marcaron mucho las palabras de Barker cuando afirmaba que todos tenemos un rol dentro de la empresa o del grupo en el cual nos desarrollamos. Y que esa complementariedad es el paradigma que nos puede llevar efectivamente a un triunfo y a un futuro mejor. Decía Barker textualmente: “Todos tenemos nuestro rol. Algunos son visionarios. Algunos son líderes, Algunos son gerentes. Algunos, seguidores. Algunos de nosotros, un número reducido, somos la combinación de las cuatro funciones. Muy de vez en cuando usted se encuentra con un visionario-líder-gerente pero con una de tales personas no es un requisito para obtener el futuro. Sólo necesitamos equipos constituidos por todos ellos: visionarios, líderes y gerentes, y desempeñar nuestros roles de la mejor manera posible”.