Artículo de la paradoja del Paradigma de Joel Barker
Un paradigma es el resultado de los usos, y costumbres, de creencias establecidas de verdades a medias; un paradigma es ley, hasta que es desbancado por otro nuevo. Los paradigmas en el contexto del Liderazgo, son enfoques o planteamientos compartidos que representan una forma fundamental de pensar, percibir, estudiar, investigar y entender el liderazgo. Durante los últimos 60 años, las investigaciones en la materia han modificado los paradigmas. Las principales clasificaciones de la teoría de liderazgo, en conjunto, representan un cambio en el paradigma del liderazgo.
La educación es el mejor ejemplo donde se aplican los paradigmas. Un líder educativo introduce el cambio, lo que implica investigación, riesgos y, en algunos casos, sacrificios. El poder de los paradigmas se refiere a las consecuencias de los mapas o esquemas mentales que cada individuo tiene y que afectan sus maneras o modos de ver y vivir la vida. Es un tema de gran importancia práctica y de reconocido valor a la hora de mejorar o cambiar en la vida personal y social. Por lo tanto los paradigmas se cambian, y son descubridores y pioneros de nuevos paradigmas los que se encargan de presentarnos nuevos mapas, nuevos esquemas, nuevas verdades irrefutables en ese momento, pero que no tienen garantizada su permanencia porque en su naturaleza encierran al cambio. Como señala Barker, los paradigmas también se reflejan en reglas y reglamentos que nos condicionan en nuestras capacidades de hacer o no hacer, por lo cual en cualquier momento las reglas cambian.
La relación entre Paradigmas y Principios se completa con su expresión en los Procesos, porque los paradigmas sin ser necesariamente principios o valores, se relacionan profundamente para descubrirse o expresarse en procesos concretos, simples o complejos. Los procesos son resultados o productos de principios y paradigmas anteriores, que orientan consciente o inconscientemente la construcción de dichos procesos.
El poder de los paradigmas se refleja con efectos negativos y positivos. Los paradigmas tienen influencia en la manera de pensar, sentir, hablar y hacer de los seres humanos. En la actualidad, el auténtico líder fomenta el cambio de "paradigma" en quienes están preparados para ello. Incluso en un principio puede haber escaso apoyo del grupo ante sus nuevas propuestas, pero si el líder es capaz de motivar a sus seguidores tan intensamente que transforman su actitud y despiertan su conciencia, su labor alcanza el éxito.
Los líderes son los que introducen los cambios de paradigma a partir de nuevas perspectivas. El efecto de los paradigmas se refleja en todos los ámbitos de la vida social, desde la manera de comer, hasta la manera de dormir. Este reflejo tiene en los hábitos la expresión concreta y tangible porque somos seres de hábitos buenos y malos que nos ayudan o perjudican en la vida cotidiana. Un ejemplo es el hábito negativo de llegar tarde y fuera del horario acordado a los compromisos.